La periodoncia es una de las ramas de la ciencia odontológica y es una especialidad de la odontología que diagnostica, previene y trata las enfermedades de las encías. Literalmente, en latín, peri = entorno, odonto = diente, logy = ciencia.
Periodoncia Enfermedades de las encías
La periodoncia abarca los tejidos óseos duros y blandos que soportan los dientes y mantienen su posición en el maxilar (hueso de la mandíbula superior) y la mandíbula (hueso de la mandíbula inferior). Este grupo de tejidos denominado periodonto está formado por el hueso alveolar (la parte del hueso de la mandíbula en la que se encuentran los dientes), la raíz, los ligamentos periodontales que unen los dientes al hueso alveolar y las encías.
Los dientes se encuentran en el hueso alveolar y están sostenidos por los ligamentos periodontales que cubren la raíz del diente. Estos tejidos peridentales vivos se adaptan a los distintos cambios que se producen en la boca, permitiendo que los dientes mantengan su posición de forma estable.
La función principal del periodonto (tejidos de la encía) es actuar como amortiguador, sujetando los dientes en el hueso y evitando que se dañen cuando reciben una fuerza excesiva al masticar. Los tejidos peridentales (periodonto) y los dientes trabajan en armonía para protegerse de las fuerzas dañinas y garantizar un funcionamiento correcto durante la masticación.
La salud bucodental de un paciente suele estar relacionada con su salud general y, en concreto, la salud de las encías proporciona información sobre el estado general sistémico del paciente. Las enfermedades sistémicas (diabetes, tabaquismo, consumo de alcohol, cardiopatías, etc.) pueden afectar directamente a los tejidos que soportan los dientes. Algunas patologías (enfermedades) pueden detectarse en la boca antes de que aparezcan en cualquier otra parte del cuerpo.
TRATAMIENTOS PERIODONTALES
Las enfermedades periodontales son muy comunes en la sociedad y son el resultado de la inflamación de los tejidos periodontales (encías). Gingivitis = La gingivitis es una inflamación de las encías debida a la acumulación de bacterias en los dientes y las encías.
La gingivitis suele aparecer al menos una vez en la vida en todas las personas. La inflamación es un mecanismo de defensa que tiene el cuerpo humano para luchar contra las bacterias patógenas (causantes de enfermedades), pero cuando no se trata correctamente, puede causar daños en los tejidos.
Esta inflamación se extiende desde las encías a los tejidos más profundos y provoca la destrucción del ligamento periodontal y del hueso alveolar, lo que se denomina periodontitis. Periodontitis significa literalmente inflamación de los tejidos periodontales y es más grave que la gingivitis = Gingivitis.
Esta situación provoca la pérdida de soporte óseo alrededor de los dientes e incluso en estadios más avanzados, los dientes pueden perderse por sacudidas.
TRATAMIENTO DE LA PERIODONTITIS
En el tratamiento de la periodontitis es fundamental eliminar la placa bacteriana adherida a la superficie de los dientes que acelera el proceso patológico e instaurar unos hábitos de higiene bucal óptimos
Por lo tanto, el primer paso en el tratamiento periodontal consiste en la concienciación del paciente y la educación en higiene bucal.
En esta primera etapa, es muy importante asegurarse de que el paciente observa adecuadamente la higiene bucal. Es muy importante eliminar el sarro y la placa bacteriana en las zonas que el paciente no puede alcanzar con los utensilios de limpieza como el cepillo de dientes, la seda dental y el cepillo de interfase. En algunos casos, la infección en los tejidos puede persistir a pesar del tratamiento profesional, en cuyo caso se recomienda una terapia antibiótica adicional al tratamiento.
Unas semanas después de esta primera fase, se comprueba la salud periodontal del paciente, su higiene y la progresión de la enfermedad. El sondaje se realiza para comprobar la profundidad del espacio entre las encías y el hueso alveolar, denominado bolsa periodontal (el espacio donde se alojan las bacterias capaces de destruir las encías y el hueso).
Cuanto mayor es esta profundidad, más avanzada está la enfermedad, y esta profundidad es directamente proporcional a la destrucción en los tejidos. En presencia de una bolsa periodontal, se debe eliminar la encía y realizar una operación de colgajo, es decir, una cirugía gingival. Con la cirugía gingival se puede llegar a las zonas deseadas bajo las encías y realizar una limpieza detallada. Esta cirugía proporciona una visión directa y garantiza que la zona afectada esté completamente limpia.
Además de la cirugía gingival (operación de colgajo), es conveniente realizar cirugías regenerativas (reconstructivas) en las que se trata la pérdida de hueso para restaurar los defectos óseos causados por la periodontitis. En las cirugías de regeneración se utilizan biomateriales como injertos (polvo de hueso) y membranas.
En conclusión, el éxito del tratamiento periodontal depende de la experiencia del médico y de la capacidad del paciente para mantener la higiene bucal.
Las sesiones de control en los tratamientos periodontales son muy importantes para el control y la prevención de la progresión de la enfermedad. Las sesiones de control, denominadas recall, son muy importantes para la continuidad de los resultados obtenidos con el tratamiento periodontal y garantizan que la enfermedad no reaparezca.